CHARLES SANDISON

CHARLES SANDISON

Editorial:
KOLDO MITXELENA
Materia
Artistas
ISBN:
978-84-7907-418-0
Páginas:
126
Encuadernación:
Rústica
$682.50 MXN
IVA incluido
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Charles Sandison pertenece a una generación de artistas que se inició en las nuevas tecnologías antes de coger un pincel. El escocés, que en estos momentos trabaja en un proyecto encargado por las Naciones Unidas sobre la carta de los Derechos Humanos y tiene pendiente una muestra en el Musée d'Orsay, presenta siete instalaciones en la sala de exposiciones del Koldo Mitxelena con el título global Sala de lectura.

El artista, que vive en Finlandia donde ha encontrado un entorno cultural muy cercano a sus propias inquietudes, explicaba ayer que «es mi proyecto más ambicioso de los últimos años». Su obra parte de la más pura tecnología a la que dota de una base muy humana al tratar temas como el lenguaje, el ADN, la gestación, o crear, con trozos de imágenes de distintas personas de su entorno familiar, nuevas figuras «que pueden existir o no». Todo parte de un software que unido a unos proyectores lanza imágenes casi minimalistas, pero a la vez muy cálidas. «La exposición nunca es igual, porque sus elementos se mueven de forma aleatoria».

La pieza que da nombre a toda la muestra ocupa el espacio central. Palabras como umea, emea, hi, arra o janaria, recorren sin orden toda la sala. Toman formas distintas y las imágenes varían según la posición del espectador que obstruye la luz. «Si no existiera el techo, se prolongarían hasta la biblioteca del KM. No es algo circunstancial, sino muy premeditado. Buscaba palabras primarias, sustantivos, no adjetivos. Además, tenía claro que debían ir en euskera. Tiene ciertas similitudes con el finés, especialmente el desconocimiento de sus orígenes. Cuando lo oí en mi primer paseo por el centro de San Sebastián, me di cuenta de que me gustaba mucho su sonido».

Siente que su obra no es tecnología pura. «Me interesa crear algo que vaya más allá de la técnica pero, al mismo tiempo, el ordenador me permite realizar todo lo que tengo en mente con un gran ahorro de tiempo. Ante el ordenador siento las mismas sensaciones que otro artista más convencional con un pincel en la mano».

El bien y el mal, donde la sala se convierte en una embarcación; Figuras y letras, con figuras humanas de tamaño real compuestas por cientos de palabras, Primer aliento, sobre el genoma humano; Lumière, un recorrido por la naturaleza; Invocación, donde en una sala a oscuras se oyen textos