Este libro nos presenta una mirada detallada, divertida y sumamente íntima acerca de este gran artista mexicano, tan famoso por sus “sillas mano” como por sus dibujos rebuscadamente surrealistas. Trilce publica un segundo libro dedicado plenamente a Friedeberg (el primero, Pedro Friedeberg, publicado en 2010), esta vez alejándose del ámbito plenamente artístico que, por supuesto, no deja de estar presente en la vida de un hombre tan creativo, y enfocándose en lo personal. Las palabras parecen volar mientras Pedro cuenta sobre su infancia- comenzada en Italia, nutrida en México-su pasión por la literatura, sus comienzos y desarrollo como artista, y por supuesto, sus amores a través de los años. Se asoman y, a ratos, se quedan algunas de las figuras más importantes del arte y la cultura del siglo XX, con quien Friedeberg se relacionó: Remedios Varo, Leonora Carrington, Jack Kerouac, Luis Barragán, y su inolvidable mentor, Mathias Goeritz. El sarcasmo se filtra entre las oraciones, en las observaciones sencillas y graciosas sobre México, el arte, y la vida en general. Al leer De vacaciones por la vida uno se siente como si se tomara un largo café con Pedro Friedeberg, en el que éste le cuenta de la forma más sincera sus recuerdos más preciados.
