¿Por qué se echan a andar los filósofos? ¿Coincide la idea que tienen de la naturaleza con la que se encuentran en la realidad? ¿Qué relación hay entre pasear y pensar? Muchos de los filósofos más importantes comparten una pasión: caminar al aire libre. Algunos repiten el mismo recorrido cada día y otros no paran de explorar nuevos caminos; hay quienes odian el campo y quienes adoran los parajes sublimes; unos disfrutan a la sombra de limoneros y otros se ocultan en bosques misteriosos. La Naturaleza nunca será un mero decorado para Nietzsche, Heidegger, Adorno, Sartre y otros grandes pensadores, sino la dimensión fundamental de algunas de sus más famosas ideas. Esta polémica y delirante crónica de Ramón del Castillo le da un nuevo giro a la historia del caminar, que nos ha cautivado gracias a Rebecca Solnit, Frédéric Gros o Merlin Coverley.