AA.VV
Entre 1921 y 1922, Roberto Montenegro pintó el mural El árbol de la vida en la Sala de Discusiones Libres de la Universidad Nacional de México, que ocupaba el antiguo templo de San Pedro y San Pablo. Entre 1922 y 1923, Diego Rivera pintó La creación en el anfi teatro Bolívar de la Escuela Nacional Preparatoria. Las dos obras dieron inicio al movimiento de pintura mural mexicana.
La pintura mural tuvo una larga y desigual fortuna a lo largo del siglo XX